El “Código de Conducta y Buenas Prácticas de la Universidad” nace con el objetivo de ser una guía que recoge los principios éticos y pautas de conducta positivas que deben orientar a la institución y a la comunidad universitaria en sus actuaciones diarias.

  • Surge como una herramienta de referencia para procurar una línea de conductas responsables por parte de todos los miembros de la Universidad y trata de proyectar la cultura empresarial partiendo de la misión y los objetivos de la misma.
  • Expresa el compromiso moral de la Universidad con unos valores y principios generales de comportamiento honrado en lo relacionado a su actividad y a sus grupos de interés.
  • Contribuye al desarrollo de un pensamiento ético de excelencia que sea compartido, apreciado y cumplido por los diversos actores sociales de los que se compone la comunidad universitaria y las personas jurídicas a ella vinculadas.

La voluntad de cumplir y comprometerse con unas prácticas responsables y coherentes constituye un pilar fundamental y la fuente de donde bebe nuestra Responsabilidad Social Corporativa, por lo que este propósito de inspiración de la conducta profesional a través de una serie de valores prioritarios es esencial para reforzar las señas de identidad de la Universidad.

Para cumplir estos objetivos, el Código facilita el conocimiento de la misión, visión y valores que conforman la cultura de la Universidad, establece una serie de conductas que la Universidad quiere promover y observar en su desempeño y en el de sus alumnos y trabajadores, y desarrolla un conjunto de normas y políticas que sus miembros deberán compartir, aceptar y cumplir.

Es igualmente importante que los terceros, asociados y proveedores externos conozcan estas políticas y procedimientos y rijan sus acciones siguiendo el conjunto de prácticas y conductas responsables y éticas definidas en el Código Ético de la institución. Este es nuestro compromiso y constituye el Código Ético de la Universidad Isabel I.