rebeco

Rupicapra pyrenaica. Revista Antropocene.it

15 de junio de 2022. Diego Arceredillo, profesor de la Universidad Isabel I ha realizado una investigación, en colaboración con los docentes Guillermo Rodríguez Gómez, de la Universidad Complutense de Madrid y Carlos Díez, de la Universidad de Burgos, centrada en los restos fósiles de rebeco recuperados en el yacimiento paleolítico de la Cueva del Valdegoba. El yacimiento de Valdegoba, situado a 28 kilómetros de la ciudad de Burgos es uno de los principales exponentes de esta especie a nivel europeo y punto clave para el análisis de su evolución y paleoecología durante el Pleistoceno Tardío.

El buen estado de conservación de sus restos ha permitido llevar a cabo diferentes estudios paleobiológicos, actualizando su asignación taxonómica y determinando la edad de muerte, su dimorfismo sexual, así como la época en la que fueron acumulados. Los paleontólogos y expertos en prehistoria han podido constatar que los rebecos fueron un recurso alimenticio relevante para los neandertales. Igualmente se destacó del estudio de los restos fósiles las diferencias entre las poblaciones de rebecos en el paleolítico respecto a las ibéricas actuales.

Ubicación de la cueva. Fuente: estudio de campo.

Los resultados de la investigación revelan que el peso de un individuo de rebeco adulto es de 35.49 kg de promedio, con especímenes que llegan a alcanzar los 53.10 kg. “A partir de datos relativos a las poblaciones actuales de rebecos cantábricos, de entre 24 y 30 kg, y pirenaicos (de entre 22 y 28 kg) se puede inferir que los ejemplares recuperados en la cueva de Valdegoba muestran unos pesos mayores a los de las poblaciones actuales, pudiendo ser una buena opción cinegética para las poblaciones de neandertales que poblaron la submeseta norte durante el paleolítico medio”, explicó Guillermo Rodríguez, uno de los investigadores del proyecto.

Estas conclusiones se han mostrado en el IX Encuentro Internacional de Tafonomía y Fosilización que se ha celebrado este mes de junio, en el que han participado, además de los tres docentes que realizaron el estudio, los profesores Tamires Atavides Silva, de la Universidad Federal de Goiás, Juan Luis Arsuaga, de la Universidad Complutense de Madrid, así como Estefanía Pérez Fernández, del BUCHI Labortechnick de Suiza y Philippe Fernández del CNRS, Aix Marseille Université de Francia.

Proximidades de la cueva de Valdegoba. Fuente: Diego Arceredillo.