Los dos alumnos de prácticas acompañados por agentes de la Policía Nacional de Santa Cruz de Tenerife. Foto cedida por la Policía Nacional.
24 de mayo de 2022. Zebensui Cruz Mesa y Yerai Isai Samarin Padilla, alumnos del Grado en Criminología de la Universidad Isabel I han realizado sus prácticas académicas externas en la Comisaría Provincial de Policía Nacional de Santa Cruz de Tenerife. Con un total de 100 horas de prácticas, los alumnos ha podido tener un primer contacto con el entorno profesional, gracias a los acuerdos de colaboración educativa suscritos por el Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado para la Seguridad, en el marco del convenio educativo del Ministerio del Interior, que permite a los estudiantes realizar prácticas externas con la Policía Nacional o la colaboración con este cuerpo para la realización de Trabajos de Fin de Grado o Trabajos de Fin de Máster.
La experiencia ha sido enriquecedora tanto para los alumnos como para el departamento de policía científica de la Policía Nacional en el que realizaron sus prácticas externas. Según ha señalado el responsable del Departamento de Comunicación de la Policía Nacional en Tenerife estas prácticas “aportan los conocimientos específicos en sus estudios universitarios a los futuros criminólogos y, por otro lado, conocen el trabajo policial realizado por la institución, que es conocido de primera mano por los estudiantes”.
Los alumnos han tenido un tutor de prácticas de la Universidad y otro tutor asignado por la Policía Nacional, el delegado en formación de la Comisaría Provincial de Santa Cruz de Tenerife. Los alumnos han destacado el grado de profesionalidad de los agentes adscritos a este departamento. Tanto Zebensui como Yerai consideran la experiencia muy interesante, ya que han podido trabajar en reseñas e inspecciones oculares, es decir, en la identificación de delincuentes a través de sus huellas dactilares y en la visualización del entorno delictivo para extraer las huellas en el escenario de un delito.
Posteriormente, ambos pudieron conocer el funcionamiento del cotejo de estas huellas en la base de datos de la Policía Nacional, para tratar de identificarlas y comprobar si estas huellas corresponden a una persona previamente fichada policialmente. “En el caso de que las huellas no se identifiquen, quedan archivadas como huellas latentes, para, si en un futuro vuelven a coincidir en la base de datos, se puedan imputar otros delitos al sospechoso", indicó Zebensui, que destacó haber disfrutado mucho en la inspección ocular que realizaron en un vehículo robado. En este caso, gracias a las huellas recogidas en el coche, se pudo identificar al delincuente, que tenía ya antecedentes penales por delitos similares.
“Me han gustado las prácticas en la investigación de crímenes. Me quedaría con las inspecciones oculares, ya que en esta sección el criminólogo debe demostrar toda su pericia en la investigación”, destacó Yerai. Este alumno pudo conocer también las secciones de delincuencia informática y documentoscopia. Le llamó la atención que casi el 100% del tiempo, el departamento de delincuencia informática, trabaja en casos de pornografía infantil.
Ambos están en el tercer curso del Grado en Criminología. Y si Zebensui piensa que su futuro podría estar enfocado en esta rama de la Policía Científica, para Yerai, su meta está en abordar la criminología desde el punto de vista del Derecho.