
Partido de balonmano masculino.
1 de diciembre de 2025. El director del Máster en Rendimiento Deportivo de la Universidad Isabel I, Iván González García, participa en un estudio pionero que analiza cómo las diferencias de género influyen en los comportamientos de juego limpio (“fair play”) en el balonmano de élite. La investigación, publicada en el Journal of Human Sport and Exercise, lleva por título “Gender differences in fair play behaviours in elite handball: Evidence from World Championship teams” y ha sido realizada en colaboración con Ignazio Leale, Giuseppe Battaglia y Manuel Gómez‑López.
El estudio se fundamenta en un análisis exhaustivo de 464 partidos correspondientes a Campeonatos Mundiales de Balonmano disputados entre 2007 y 2023, evaluando distintas variables como tarjetas rojas, suspensiones de dos minutos, tarjetas azules y amarillas. Para examinar las diferencias entre equipos masculinos y femeninos, los investigadores aplicaron la prueba estadística U de Mann‑Whitney y utilizaron el programa G*Power 3.1 para garantizar la potencia estadística de los resultados.
“Los equipos mejor clasificados demostraron una conducta más disciplinada y respetuosa con las reglas, lo que confirma que el fair play está directamente relacionado con un alto rendimiento deportivo”, explica el profesor González García.
Diferencias de género en el comportamiento deportivo
El análisis reveló que los equipos masculinos acumularon un mayor número de sanciones que los femeninos en casi todas las ediciones de los campeonatos, incluyendo tarjetas rojas y suspensiones de dos minutos. La excepción fueron las tarjetas amarillas, donde no se observaron diferencias significativas entre hombres y mujeres.
Según el propio González García, “estas diferencias no se deben únicamente a la intensidad física del juego masculino, sino también a factores psicológicos y estratégicos, como la presión competitiva, la táctica de equipo y la regulación emocional individual y colectiva”.
La investigación destaca que “la conducta disciplinada no limita la competitividad; de hecho, los equipos más disciplinados tienden a alcanzar posiciones más altas en la clasificación final, demostrando que el fair play es un componente estratégico y no solo ético”, subraya el profesor.
Implicaciones para la formación y el entrenamiento
La coautoría de Ignazio Leale y Giuseppe Battaglia, ambos de la Universidad de Palermo, junto a Manuel Gómez López de la Universidad de Murcia, aporta una perspectiva internacional al estudio. Los investigadores señalan que sus hallazgos son especialmente relevantes para entrenadores, preparadores físicos y psicólogos deportivos, ya que el fair play puede considerarse una competencia entrenable que favorece la cohesión del equipo, la toma de decisiones y la gestión emocional durante los partidos.
El estudio propone programas de intervención específicos para fomentar el juego limpio, la empatía y la conducta prosocial entre los jugadores. En los equipos masculinos, estos programas podrían centrarse en la reducción de comportamientos antisociales y en el manejo de la agresividad; mientras que en los equipos femeninos se recomienda reforzar la cooperación, la disciplina competitiva y la confianza en la dinámica grupal.
“El objetivo es demostrar que la excelencia deportiva no está reñida con los valores éticos del deporte, y que cultivar el fair play puede ser un factor diferenciador en el rendimiento de élite”, añade Iván González.
Un estudio con proyección internacional
La investigación, además de su relevancia académica, tiene un impacto práctico considerable para federaciones, clubes y entrenadores de balonmano a nivel mundial. Los autores esperan que sus resultados inspiren la implementación de estrategias de entrenamiento centradas en la conducta ética y la regulación emocional, promoviendo así una práctica deportiva más segura, respetuosa y efectiva.
En palabras de los investigadores, “comprender cómo influyen el género y la disciplina en el rendimiento y el comportamiento deportivo permite diseñar intervenciones más precisas y efectivas, beneficiando tanto al equipo como al deporte en general”.