Burgos, 23 de julio de 2015. La figura histórica y literaria del Cid ha sido protagonista de dos ponencias en el marco del L Congreso Internacional de la Asociación Europea de Profesores de Español (AEPE) que alberga, hasta el 24 de julio, la Universidad Isabel I.
La escritora, doctora en Geografía e Historia, investigadora y dramaturga valenciana Maruxa Duart centró su ponencia en la figura histórica del Cid. Personaje que calificó de «muy relevante» en la historia de Valencia. «Hoy en día no es muy conocido ni apreciado», comentó la escritora, que explicó que la forma de estudiar la historia en las comunidades autónomas «es sesgada y se mira demasiado el ombligo».
La autora abogó por un cambio en la enseñanza de contenidos en toda España: «Hay cosas, como el Cid, que hay que estudiar con sus luces y sus sombras». Para Duart, el Cid es un personaje de su tiempo pero que transmite unos valores que pueden extrapolarse a nuestros días. «Fue un hombre que luchó contra las facciones más yihadistas de su época», aseveró Duart; «podemos sacar muchas enseñanzas de la historia del Cid».
La segunda ponencia que abordó la figura del Cid fue a cargo de la catedrática de la Universidad de Valencia Pascualita Morote, que, bajo el lema «De Burgos a Valencia el Cid cabalga», centró su conferencia en los aspectos literarios de este personaje histórico y su repercusión en la literatura mundial. «Del Cid hay óperas, novelas y obras de teatro como la de Cornaille», recordó Morote, y añadió que, además de la película de Charlton Heston, es imprescindible la obra de Antonio Gala Anillos para una dama, que «enfoca la historia desde el punto de vista de doña Jimena».
Para la catedrática, el mito del Cid nace en Valencia, cuando gana una batalla después de muerto: «Es lamentable que las controversias políticas no le den su merecida importancia».
El momento álgido de la jornada lo proporcionó el recital de poetas castellanas, en el que participaron la palentina Esperanza Ortega, la burgalesa Begoña Abad y la vallisoletana Pilar Salamanca.
El acto, que se desarrolló en el Aula Magna de la Universidad Isabel I, reunió a numerosos congresistas interesados en la poesía como recurso en la docencia del español. «Resulta más fácil aprender un idioma recordando poesías y canciones», explicó Esperanza Ortega; «yo aprendí italiano leyendo a Dante».
La poesía ha sido desde siempre un género minoritario porque requiere una lectura reflexiva, «pero está más vivo que nunca», comentó Begoña Abad, y añadió que «muchas obras literarias sufren el paso del tiempo. La buena poesía perdura».
El viernes 24 de julio tendrá lugar la clausura de esta edición del Congreso Internacional de Profesores de español, que contará con la presencia del poeta Luis Alberto de Cuenca (a las 13.00 h), conocido para el gran público, entre otras cosas, por ser el letrista de numerosas canciones de La Orquesta Mondragón.