María Hernández

María Hernández en el Laboratorio de Criminología de la Universidad Isabel I.

4 de mayo de 2023. La profesora María Hernández Moreno, Coordinadora de Investigación y Docente en la Facultad de Criminología de la Universidad Isabel I, ha conseguido la tercera posición en la iniciativa #CUENTAME11F con un vídeo sobre su tesis doctoral centrada en los test quimioluminiscentes para la localización de manchas de sangre. Hemos entrevistado a la profesora Hernández Moreno para conocer qué supone este reconocimiento social por su trabajo.

Has conseguido el reconocimiento social por tu trabajo en redes sociales. Cuéntanos ¿qué supone para ti, como mujer, como científica, ese reconocimiento?

Mucho orgullo, porque al final, es un trabajo de mucho tiempo que, poquito a poquito, consigues que se visibilice. Es difícil porque, además, es un campo muy cerrado, apenas hay investigación en esta materia y al final es difícil difundir y que estos conocimientos calen en la sociedad. Esta iniciativa ha permitido, además, apoyar a las chicas dentro de la ciencia, de cualquier disciplina. Así que es un doble orgullo, porque nos están dejando un huequito específico para nosotras, para ayudarnos con nuestra labor, entonces, es maravilloso.

Eres profesora universitaria, En ese sentido, tienes ahí un campo muy importante en el que abonar y sembrar ese germen para futuras generaciones.

Claro, que haya cada vez más mujeres dentro de la ciencia y que, sobre todo, se visibilice que no estamos únicamente en un laboratorio, sino que tenemos otra labor detrás es fundamental, porque muchas de las compañeras de la iniciativa se dedican únicamente a investigación, pero hay más. Mi sueño es la investigación, pero no siempre te puedes dedicar solamente a trabajar en un laboratorio. Tener la posibilidad de enseñar, de demostrar que haces más cosas y que, también te mueves, que publicas diferentes artículos, o das clases en una universidad, o en una academia, o te formas, abre un abanico de posibilidades y no nos encasilla a las científicas únicamente en un laboratorio. Hay muchas otras maneras de hacer ciencia, y con esa iniciativa, también se visibiliza un poco más esa labor.

La universidad es el nexo de transferencia del conocimiento a la sociedad y también te abre muchas puertas, ¿no lo consideras importante para tu investigación?

Claro, al final, también que te permitan investigar es positivo. Hay muchísimas mujeres que hacemos investigación y que nos frenamos en la tesis. Por desgracia, no tenemos como otros campos de trabajo, más ayudas o más información. En mi caso, con esta iniciativa he tenido casi mil reproducciones. Al final, nunca sabes quién te va a ver e interesarse por tu investigación. Esta iniciativa, me parece estupenda y que creo que además de ayudar a futuras generaciones, también permite que las mujeres científicas nos pongamos en contacto. De hecho, varias compañeras han empezado a seguirme por redes sociales, por LinkedIn, porque nos resulta interesante seguir la carrera de otra persona, aunque no sea de tu campo y dar ese apoyo.

¿Qué escollos te has encontrado en tu profesión hasta llegar hasta aquí?

En mi caso he elegido una especialización tan concreta que no había nadie antes en España que hubiese hecho investigación en mi campo, en manchas de sangre en escena. La investigación ha sido muy difícil porque no he tenido ayuda de nadie. Se investiga dentro de Policía y Guardia Civil, pero fuera, en lo que sería un laboratorio a nivel académico, no existe.

Mi tesis es la primera en este campo; la de mi director fue más teórica, aunque también abordaba este tema. Esta circunstancia ha sido un obstáculo increíble, porque no he logrado tampoco estar en un grupo de investigación, porque no existía, ni he logrado financiación. Creo que ha sido bastante más complicado partir desde abajo, porque no tenía ese apoyo de otras compañeras, que tienen un grupo más reconocido de trabajo o una profesión un poco más extendida.

María Hernández en el Laboratorio de Criminalística de la Universidad Isabel I

La profesora Hernández Moreno en el laboratorio.

A nivel internacional sí es un tema muy investigado y más reconocido, pero aquí aún no. Por eso es absolutamente fundamental avanzar en este tipo de investigaciones en España, ya que vamos por detrás del resto de Europa. En Holanda, que es donde yo he ido a formarme, sí que se investiga mucho, y hay figuras concretas dentro de la Policía que se dedican únicamente a este tipo de pericias. Cuando intenté con mi tesis colaborar con Guardia Civil y Policía no me dejaron a nivel oficial. Necesitamos asentar las bases para investigar, porque mi labor, al final, ha permitido determinar cuál es el mejor reactivo que se puede utilizar en la escena de un crimen. Las conclusiones de mi investigación hoy en día pueden utilizarse por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Reactivos para localizar sangre

La proyección práctica de tu tesis doctoral ¿sería ayudar a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en la resolución de crímenes?

De alguna manera, auxiliarles en tener información práctica y extrapolable a otras escenas que les permita saber cuál de los reactivos que se emplean para localizar sangre, como el típico Luminol que pulverizan en una serie y sale todo azul, es el más adecuado. Yo elegí los cuatro reactivos más comercializados, incluyendo diferentes variables y con diferentes factores de clima, paso del tiempo y demás, para poder llegar a determinar, de forma objetiva, cuál era el mejor y cuál es el que más se recomienda en cada caso.

Si tienes una oportunidad para aplicar estos conocimientos cuando estás en la escena, puedes tener una información previa que te diga, ¡cuidado!, este reactivo a lo mejor en frío, o si ha hecho calor, por ejemplo, no te va a dar un buen resultado, y es mejor usar otro. De hecho, en mi investigación seguí la recomendación de uno de los inspectores jefes de inspecciones oculares que me dijo que esta información les vendría muy bien.

¿Por qué se te ocurrió este tema a la hora de investigar para tu tesis doctoral?

Cuando empecé en Criminología, mis compañeras pronto se decidieron por temas de prevención, violencia de género, menores… temas más sociales, pero a mí me gustaba la investigación en el escenario del crimen. Al terminar, me interesé por estudiar un Máster Oficial de Criminalística. Me gustó y entre los profesores que conocí, había uno que se dedicaba a manchas de sangre. Eso me llamó muchísimo la atención.  Fue mi director de TFM, publiqué los resultados del TFM y me invitaron a formar parte del programa de doctorado en la misma línea de investigación. Los profesores que me orientaron en mi investigación son de la Dirección General de Policía Científica. Descubrí que mi trabajo podría tener unas conclusiones muy útiles y no me lo pensé. Al final, a mí me ha merecido la pena y que el resultado, sobre todo, se pueda divulgar, a mí me llena de orgullo, sin duda.

María Hernández en el Laboratorio de Criminalística de la Universidad Isabel I

María Hernández realizando una prueba para detectar huellas sobre una superficie.

Para las nuevas generaciones de científicas ¿Qué valores debe tener una niña para llegar a conseguir esa cuota de éxito que tú has alcanzado?

Más allá de los valores que, evidentemente deben tener de esfuerzo y perseverancia, en la medida de lo posible, les recomiendo que no decaigan en su lucha interna. Si ellas, de verdad, creen que puede llegar lejos, que sigan hasta el final, porque va a ser difícil. La labor de investigación en España, por desgracia en mi caso y en el de las compañeras que no tienen una beca y no tienen financiación, es muy compleja; a veces no está bien reconocido; y tampoco suele estar bien pagado. Es difícil porque hay mucha gente compitiendo por muy poquitos puestos. Les aconsejo perder la esperanza, y si creen en ellas, que sigan adelante, porque al final eso es lo más importante.  

Si lo estás haciendo bien y que crees que tu trabajo puede servir para algo, aunque sea por redes sociales, (si no tienes un grupo de investigación, si no consigues financiación,) divulga tu labor. Un ejemplo, cuando llegué a la Universidad Isabel I, parte del temario que yo iba a impartir en Criminalística, tenía ya parte de los resultados de mis investigaciones anteriores. Cuando lo vi, me hizo muchísima ilusión, porque nunca pensé que llegasen a impartirse a los alumnos esas investigaciones.

Colaborar con Policía

¿Cómo ves tu futuro como investigadora? porque aparte de docente, también eres investigadora, ¿qué medios crees que necesitarías o hasta dónde quieres llegar?

Mi sueño sería que me dejasen llegar a colaborar con Policía. En Europa, existe la figura del colaborador externo. Mi función ahora es intentar hacer todo el ruido que pueda para que lleguen mis resultados de investigación a los responsables de estos departamentos y sean conscientes de que mi figura les puede beneficiar para que fructifique esa colaboración.

Si eso no ocurriese, quiero seguir investigando en esta materia porque no hay nada y creo que es importante sentar las bases. En esta línea, sería interesante conseguir algún tipo de financiación a través de la FECYT (Fundación Española para la Ciencia y Tecnología). Intentar conseguir financiación pública para seguir investigando en este ámbito y seguir progresando.

Además, como docente, puedes sembrar esta semilla investigadora en tu alumnos.

Sí, de hecho tengo ahora un alumno de TFG que está interesado en mi ámbito y que está intentando ampliar uno de mis artículos. Si sale bien la idea es publicarlo juntos.