Mario Sastre Sánchez y Eduardo Fernández García durante el webinar emitido por el canal de YouTube de la Universidad Isabel I.
22 de marzo de 2024. La gestión de las infraestructuras críticas en España es vital para garantizar la seguridad y el funcionamiento adecuado de los sectores esenciales del país. Estos incluyen energía, transporte, agua, salud, comunicaciones, finanzas y tecnologías de la información, entre otros. El gobierno español, a través del Centro Nacional de Protección de Infraestructuras y Ciberseguridad (CNPIC), establece políticas y medidas para proteger estas infraestructuras de amenazas como ataques cibernéticos, desastres naturales o sabotajes. Se promueve la colaboración público-privada para identificar y mitigar riesgos, así como mejorar la resiliencia ante posibles incidentes.
Durante el webinar organizado por la Facultad de Criminología, el docente del Grado en Ciencias de la Seguridad de la Universidad Isabel I, Eduardo Fernández García, compartió su perspectiva sobre la importancia estratégica de las infraestructuras críticas. Según Fernández García: "Las infraestructuras críticas son la columna vertebral de nuestra sociedad moderna. Desde la electricidad que alimenta nuestros hogares hasta los sistemas de transporte que nos permiten desplazarnos, estas infraestructuras son fundamentales para nuestra vida diaria".
El profesor profundizó en el tema, definiendo qué constituye una infraestructura crítica y explicó la regulación normativa y estratégica que la rodea. Además, discutió sobre los sectores y operadores declarados en España, los planes y principios de protección, y el papel del CNPIC y sus funciones.
Fernández García hizo hincapié en la importancia de la seguridad integral y global en un mundo cada vez más interconectado, especialmente en el ciberespacio, donde los ciberataques representan una amenaza significativa. "Nuestras sociedades están hiperconectadas y esa conexión es hiperglobalizada. Por ello, ya no basta con la seguridad policial; la seguridad debe ser integral y traspasar barreras nacionales", señaló.
El Sistema de Protección de Infraestructuras Críticas (PIC) se inició en España en 2014, y desde entonces se han desarrollado planes para diversos sectores, incluyendo energía, transporte, agua, salud, alimentación y más. Actualmente, hay 171 operadores críticos en España, cubriendo una amplia gama de sectores.
El PIC en España establece una terminología común en relación con la protección de los activos contra ataques deliberados tanto en el sector público como en el privado. Cuenta con una estructura organizativa a nivel nacional en la que se distribuyen funciones y responsabilidades y diseña el sistema de planificación para incardinar los Planes de Seguridad del Operador, dirigidos por normativas específicas como como la Ley 8/2011, de 28 de abril, de protección civil y emergencias, y la Directiva Europea 2008/114/CE sobre identificación y designación de infraestructuras críticas. Igualmente, ha implantado planes integrales de seguridad y una red de comunicaciones segura.
El CNPIC desempeña un papel crucial en la protección de estas infraestructuras, evaluando riesgos, tomando medidas preventivas y coordinando respuestas ante posibles amenazas. Además, existe una coordinación público-privada en materia de ciberseguridad a través de la Oficina de Coordinación Cibernética (CERTSI).
En un mundo donde los ciberataques son cada vez más frecuentes, la protección de las infraestructuras críticas se ha convertido en una prioridad nacional. Con la colaboración entre el gobierno, el sector privado y la academia, España está trabajando activamente para fortalecer su resiliencia y proteger sus activos más importantes.
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