Alejandro Jiménez Gómez - Jue, 13/05/2021 - 09:00
Serie: 'El reto del profesor en formación' (III)
Estamos rodeados de hongos y bacterias. Los encontramos en las pantallas de nuestros móviles, en los pomos de las puertas, en los alimentos y hasta en nuestra piel, viviendo en completa sintonía con muchos de ellos. Sin embargo, no somos conscientes de que nos acompañan en todo momento y cuando pensamos en organismos microscópicos, y más en la época actual, nuestra mente los asocia rápidamente con algo malo o dañino, pero, queridos lectores, esto no siempre es así.
Los microorganismos interaccionan con la especie humana, pero también lo hacen con animales y plantas. Nuestros cultivos están en continua relación con los microorganismos presentes en el ambiente, los cuales pueden disminuir su rendimiento o, todo lo contrario, con la posibilidad de potenciar su desarrollo y mejorar la calidad nutricional de las frutas y verduras que consumimos (Jiménez-Gómez et al. 2021).
Para aumentar la producción vegetal y el control de plagas en los campos, nuestro sistema agrario, más allá de técnicas tradicionales como el aprovechamiento de cenizas derivadas de la quema de poda, se basa en la adición de fertilizantes y pesticidas sintéticos (Pastor-Bueis et al. 2021).
En este contexto, conociendo cada vez más el mundo microbiano y las posibilidades que nos ofrece, desde hace décadas la comunidad científica se pregunta qué pasaría si en vez de añadir los productos comerciales habituales se añadieran hongos y bacterias cuyo metabolismo tuviera los mismos efectos, siendo seguros para la salud y respetuosos con el medio ambiente. A este respecto, durante años científicos e investigadores de todo el mundo han obtenido resultados muy interesantes y esperanzadores que, sin duda, están cambiando y modificando el sistema de producción actual. Hoy en día, ya es posible encontrar en el mercado biofertilizantes basados en la aplicación de diferentes especies de microorganismos beneficiosos para los cultivos.
Por otro lado, el sistema agrario se tiene que adaptar a una gran problemática imparable denominada cambio climático. Estaréis de acuerdo conmigo en que cada vez son más las noticias que nos llegan sobre períodos de graves sequías o, por el contrario, de precipitaciones torrenciales, ambas circunstancias con un gran impacto en el ámbito económico y social. En estas situaciones los microorganismos también pueden ayudarnos, siendo capaces, por ejemplo, de producir fitohormonas u hormonas vegetales que estimulan el crecimiento de ciertas partes de las plantas, como las raíces, cuyo desarrollo ofrece una gran ventaja si escasea el agua.
Asimismo, estas formas de vida son capaces de aportar a la planta nutrientes del suelo que la planta no es capaz de absorber, pero que le son indispensables, como el nitrógeno, el fósforo o el potasio. Así pues, añadiendo al suelo microorganismos con estas características, en forma de biofertilizantes, se puede reducir la cantidad de fertilizantes sintéticos usados (Soumare et al. 2020).
La sustitución o disminución de los productos habituales en el mercado por esta nueva alternativa se encuentra desde los últimos años entre los nuevos objetivos de la Unión Europea. Cada vez más se aboga por incrementar y mejorar estas nuevas políticas sostenibles con el medio ambiente. Y a ti, ¿qué te parecen?
Referencias bibliográficas
Jiménez-Gómez, A., García-Estévez, I., Escribano-Bailón, M. T., García-Fraile, P. y Rivas, R. (2021). Bacterial fertilizers based on Rhizobium laguerreae and Bacillus halotolerans Enhance Cichorium endivia L. phenolic compound and mineral contents and plant development. Foods, 10(2), 424.
Pastor-Bueis, R., Jiménez-Gómez, A., Barquero, M., Mateos, P. F. y González-Andrés, F. (2021). Yield response of common bean to co-inoculation with Rhizobium and Pseudomonas endophytes and microscopic evidence of different colonised spaces inside the nodule. European Journal of Agronomy, 122, 126187.
Soumare, A., Boubekri, K., Lyamlouli, K., Hafidi, M., Ouhdouch, Y., y Kouisni, L. (2020). From isolation of phosphate solubilizing microbes to their formulation and use as biofertilizers: Status and needs. Frontiers in Bioengineering and Biotechnology, 7, 425
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