Francisco L. Adell Carrasco Docente del Máster en Psicología General Sanitaria
Lun, 19/06/2023 - 10:08

Refugiados

Refugiados en la Isla de Lesbos (Grecia).

Serie: 'El ABC de la Psicología' (XXI)

 

El día 20 de junio de 2023 se celebra el Día Internacional de las Personas Refugiadas. La Convención sobre el Estatuto de los Refugiados (ONU, 1951) define a las personas refugiadas como aquellas personas que “debido a fundados temores de ser perseguidas por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a grupo social, u opiniones políticas, se encuentran fuera del país de su nacionalidad, y no pueden, o a causa de dichos temores no quieren acogerse a la protección del tal país” (p. 2).

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR, 2021) informa de más de 90 millones de personas en el mundo que se han visto obligadas a salir forzosamente de sus países de origen debido a la persecución sufrida, a los conflictos, a la violencia ejercida sobre ellos, o a la violación de derechos humanos (ACNUR, 2021). Por su parte, datos oficiales del Gobierno de España (Dirección de Política Interior, 2022) informan de 118.842 personas que solicitan refugio en nuestro país durante el año 2022.

Vallas

Dos cercas de eslabones de cadena formando una valla.

La historia de la humanidad es una historia de migraciones, donde el ser humano siempre se ha movido buscando mejores condiciones de vida. Aunque la migración forma parte de nuestra evolución como especie, nunca antes las personas habían encontrado tantas barreras para migrar: vallas fronterizas, barreras administrativas, viajes en situación extrema, etc. (Achotegui, 2015). Así, aunque es lícita la búsqueda de mejores condiciones de vida, según la definición anterior, las razones económicas no son un motivo reconocido internacionalmente para solicitar asilo en un país extranjero, lo que obliga a diferenciar entre persona inmigrante y persona refugiada (Pérez-Sales, 2004). Las personas inmigrantes salen voluntariamente de su país de origen por motivos económicos en busca de mejores oportunidades. De sociedades colectivistas, suelen ser personas jóvenes y sanas, motivadas para afrontar los peligros que supone el viaje migratorio para ayudar a su familia. Por su parte, una persona refugiada se ve obligada a salir de su país de origen. Su objetivo es huir, y aquello que les mueve es el miedo. Las personas refugiadas se caracterizan por su vulnerabilidad.

Vulnerabilidad se refiere a todas aquellas características que hacen a la persona migrante, inmigrante o refugiada, susceptible de necesitar un abordaje especial durante el proceso de acogida. Menores, menores no acompañados, personas con cualquier tipo de discapacidad, personas de edad avanzada, familias monoparentales con hijos menores, mujeres embarazadas, víctimas de trata de seres humanos, personas con enfermedades graves, personas con trastorno mental, personas que han padecido tortura, personas que han padecido cualquier tipo de violencia psicológica, física o sexual, colectivo LGTBI, y personas con necesidades especiales relacionadas con el género, son considerados colectivos vulnerables.

Desde un punto de vista psicológico, existen indicadores de necesidades especiales que ayudan a identificar dichos colectivos, como la existencia de un trastorno de salud mental diagnosticado (por ejemplo, trastorno de estrés postraumático, trastorno de estrés agudo, etc.), indicadores relacionados con el aspecto y comportamiento (por ejemplo, descuido de uno mismo y aislamiento social, tendencias autolesivas, comportamientos impulsivos, etc.), indicadores de actitud, estado de ánimo y afecto (por ejemplo, apatía, miedo y pérdida del sentido de la seguridad y protección, fatiga y cansancio, etc.), proceso de los pensamientos (por ejemplo, alteraciones del sueño, dificultad para concentrarse, etc.), percepción de uno mismo (p.e. sentimientos de vergüenza, desesperanza, inutilidad, etc.), o indicadores de relación con los demás (por ejemplo, desconfianza, aislamiento, dificultad para interaccionar con personas del mismo sexo, etc.). La presencia de dichos indicadores puede implicar la necesidad de intervención psicológica con estos colectivos.

Atardecer frente al mar

Silueta de una mujer al atardecer mirando al mar.

Las vivencias de las personas refugiadas durante su proceso de asilo poseen características que las hacen potencialmente estresantes:

  1. La experiencia traumática vivida en el país de origen obliga a las personas refugiadas a una salida inminente sin una planificación previa, dejando atrás todo cuanto tienen (trabajo, familia, vivienda, etc.) en una situación de inseguridad e incertidumbre.
  2. La resolución administrativa de la solicitud de la persona refugiada puede demorarse en el tiempo, siendo algo impredecible e incontrolable para ellos. Además, la concesión del estatuto de refugiado no está garantizada en todos los casos, dependiendo de la documentación que pueda realizarse de los actos, motivos y agentes de persecución, así como del fundamento del miedo. La denegación implica bien la salida del país, bien permanecer en España en situación administrativa irregular, con la consiguiente pérdida de derechos.
  3. Las personas solicitantes de asilo afrontan un choque cultural importante: hábitos, rutinas y costumbres diferentes, idioma que desconocen, otras comidas y sabores, paisajes y climas distintos, etc. Este choque supondrá una necesidad de adaptación, que para Berry (2003) se consigue de forma más satisfactoria cuando las personas consiguen entablar relaciones positivas con la red social de acogida, sin renunciar a su identidad y a su propio patrimonio cultural.
  4. Es habitual que las personas migrantes no dispongan de redes de apoyo en el país de acogida. La literatura en psicología social sitúa el apoyo social como una de las variables más importantes que garantiza el bienestar (Gracia et al., 1995). En este sentido, las dificultades percibidas para una correcta integración, junto con las dificultades administrativas, ocasiona la marginación y la exclusión de las personas migrantes, aumentando aún más las dificultades.

La evidencia científica señala que no podemos afirmar que haya una relación causa – efecto entre migración y salud mental, pero sí que existe más probabilidad que se pueda dar un trastorno mental en las personas migrantes si existe vulnerabilidad previa, si el nivel de estresores es muy alto, o si se dan ambas condiciones (Achotegui, 2015). Así, nuestra responsabilidad como sociedad de acogida es importante, a través de la promoción de políticas y programas que faciliten la integración de las personas migrantes, facilitando el acceso a la salud en general y a la salud mental en particular, proporcionando capacitación en competencias interculturales a los profesionales que atenderán a las personas migrantes, fomentando el establecimiento de redes de apoyo comunitario, y reconociendo la diversidad cultural como elemento de valor en nuestra sociedad.

Bibliografía

Achotegui, J. (2015). Intervención psicológica y psicosocial con inmigrantes, minorías y excluidos sociales. Barcelona: El mundo de la mente.

ACNUR (2022). Tendencias globales de desplazamiento forzado en 2021. Recuperado el 2 de Junio de 2023.

Berry, J. W. (2003). Conceptual approaches to acculturation. En K. M. Chun, P. B. Organista y G. Marin (Eds.), Acculturation: Advances in theory, measurement, and applied research, pp. 17-38. Washington, DC: American Psychological Association.

Dirección General de Política Interior (2022). Avance de datos de protección internacional, aplicación del Reglamento de Dublín y reconocimiento del estatuto de apátrida. Datos provisionales acumulados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2022. Ministerio del Interior. Gobierno de España. Recuperado el 2 de junio de 2023.

Gracia, E., Herrero, J., y Musitu, G. (1995). El apoyo social. Barcelona: PPU.

Organización de Naciones Unidas (1951). Convención sobre el estatuto de los refugiados. Serie Tratados de Naciones Unidas, nº 2545, vol. 189, p. 137. Ginebra, Suiza. Recuperado el 2 de Junio de 2023.

Pérez-Sales, P. (2004). Psicología y psiquiatría transcultural. Bases prácticas para la acción. Desclée de Brouwer.

Editor: Universidad Isabel I

ISSN 2792-1832

Burgos, España

 

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