
Alberto Díaz, jugador del Unicaja Málaga y convocado de nuevo por la Selección Nacional de Baloncesto, esta vez, como capitán. Imagen cedida por la FEB.
12 de diciembre de 2025. El base del Unicaja Málaga y alumno del Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (CAFD) de la Universidad Isabel I, Alberto Díaz, celebra una de las mejores etapas de su carrera. Tras convertirse en el máximo asistente histórico del club, ha recibido una nueva llamada de la selección nacional, y lo hará con galones de capitán, bajo el mando del nuevo seleccionador.
Récord en Málaga: el nuevo rey de las asistencias
El pasado 15 de noviembre de 2025, en un partido de Liga ACB ante el Casademont Zaragoza, Díaz superó el récord histórico de asistencias del Unicaja, después de repartir 4 pases de canasta que le permitieron alcanzar una cifra simbólica. Con ese hito, se situó como el jugador que más asistencias ha repartido en toda la historia del club.
Tras décadas en las pistas, Alberto Díaz suma ya una trayectoria que lo sitúa como un pilar fundamental del proyecto de Unicaja, con un liderazgo evidente tanto dentro como fuera de la cancha.
Para él, este logro no ha sido casualidad, sino fruto de constancia, visión de juego y años de entrega. En sus propias palabras en la COPE indicó, tras batir la marca que: “Ni de pequeño soñé con lograr esto".
La recompensa: selección nacional bajo un nuevo ciclo
El martes 18 de noviembre de 2025, el recién nombrado seleccionador Chus Mateo dio a conocer su primera lista para las próximas ventanas FIBA de clasificación para el Mundial 2027. Entre los 14 convocados aparece Alberto Díaz.
La decisión forma parte de una apuesta clara por jugadores de la ACB, dado que en esta ventana no se cuenta con representantes de la NBA, ni de EuroLiga. Por eso, Díaz, junto a otros jugadores de perfil contrastado en la liga española, representará la veteranía y la experiencia en un grupo marcado por novedades y juventud, tal y como recoge una información de El País.
En palabras de Chus Mateo, el objetivo es construir “una buena atmósfera”, un grupo unido: “Son gente con mucha ilusión y ganas de hacer las cosas bien… eso para mí es también un acicate para que todos nos empleemos a fondo”, explica en Feb.es.
Y Alberto Díaz no oculta su orgullo: “Para mí estar de nuevo aquí en otra Ventana, con los compañeros, otro seleccionador, es ilusionante, y espero que sean muchas llamadas más”.
¿Qué representa este momento?
- Un reconocimiento merecido. Alberto Díaz representa el récord histórico de asistencias pone de relieve la regularidad, inteligencia y compromiso durante muchos años en Málaga.
- Un galardón a su liderazgo. Por su experiencia y veteranía serán claves en una plantilla de la selección en transición, en un momento de reconstrucción post-Scariolo.
- Un paso hacia la consolidación nacional. Su convocatoria confirma que sigue vivo el plan de contar con canteranos de la ACB que, con experiencia, refuercen el núcleo duro del equipo que competirá por el Mundial 2027.
- Una motivación para el Unicaja. La moral del vestuario se refuerza cuando uno de los suyos es llamado para defender los colores del país, lo que puede animar al equipo rumbo a nuevos retos domésticos y europeos.
Pasos previos por la Selección Española
Alberto Díaz comenzó su participación en la Selección Española en las categorías inferiores de la selección (sub-16, sub-18, sub-19, sub-20). Pero ya en 2022 entró con la selección absoluta en una convocatoria definitiva. De hecho, fue parte del equipo que ganó el título europeo en el EuroBasket 2022. Desde entonces ha alternado convocatorias con el equipo nacional, participando en diversas competiciones internacionales.
Con su nombre ya inscrito para siempre en la historia del Unicaja y con una nueva oportunidad para consolidarse en la selección, Alberto Díaz afronta un tramo de temporada tan exigente como ilusionante. A sus 31 años, el base malagueño vive un momento de plenitud deportiva que combina madurez, liderazgo y una influencia que trasciende estadísticas. Ahora, con el combinado nacional a las puertas de unas ventanas decisivas, Díaz vuelve a situarse en el centro del proyecto. Su próximo objetivo será demostrar, una vez más, que su mejor versión sigue aún en marcha y que su compromiso con el baloncesto español permanece tan firme como siempre.