El profesor Francisco Javier González Arechavala en el Mundial de Pamplona 2025.
13 de noviembre de 2025. Francisco Javier González Arechavala, entrenador del Club Gimnasia Burgos, es también profesor de Educación Física y docente de CAFD en la Universidad Isabel I. Con una larga trayectoria en la gimnasia artística y de trampolín, Francisco Javier González Arechavala, compagina su labor como docente y entrenador con la dirección del Club Gimnasia Burgos, uno de los pocos en España que trabaja las cuatro especialidades de trampolín. Nos habla de los retos de este deporte, de la importancia de la técnica y la seguridad, así como del papel que ocupa España en el panorama internacional.
¿Cómo fue tu entrada en el mundo de la gimnasia y cómo la compaginas con tu labor docente?
Empecé muy joven en gimnasia artística, pero con el tiempo descubrí el trampolín, una disciplina que me enganchó por su exigencia técnica y su espectacularidad. No era especialmente talentoso como gimnasta, pero me apasionaba enseñar. Así que, tras formarme en Educación Física, obtuve los títulos de técnico superior en artística y trampolín y comencé a entrenar en el Club Gimnasia Burgos.
Hoy compagino mi trabajo como profesor de Educación Física con la presidencia del club, la labor de entrenador y la docencia en el Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (CAFD) en la Universidad Isabel I. No es fácil, pero la pasión por la gimnasia lo compensa.
Has participado en varios eventos internacionales. ¿Cuáles destacarías?
He tenido formado parte del equipo técnico en distintos campeonatos europeos y copas del mundo, tanto en España como en otros países. Comencé en la Trampoline World Cup 2013, y desde entonces he participado en competiciones como la World Cup Competition Trampoline 2015, el Campeonato de Europa de Trampolín 2016, que además coincidió con la Copa del Mundo celebrada en Valladolid, y la FIG Trampoline World Cup Competition 2019, también en España. Ese mismo año estuve presente en el International Tournament Trampoline 2019, una experiencia muy especial por el nivel técnico y la convivencia con delegaciones de distintos países.
Más recientemente, he colaborado con la Federación Española de Gimnasia en varios eventos internacionales, tanto como entrenador como spotter, el más reciente en el Campeonato del Mundo de Gimnasia Trampolín celebrado en Pamplona entre el 5 y el 10 de noviembre de 2025.
Todas estas experiencias son muy enriquecedoras. Te permiten ver de cerca cómo trabajan los mejores equipos del mundo, aprender de su metodología y aplicar después ese conocimiento en el día a día con nuestros gimnastas en el club.
Acreditación de spotter.
Tu papel como “spotter” en los campeonatos del mundo es clave. ¿En qué consiste exactamente?
El spotter es una figura de seguridad imprescindible en la gimnasia de trampolín. Nos situamos alrededor del aparato con colchonetas para intervenir si el gimnasta puede perder el control al ejecutar sus ejercicios o corre riesgo de caer fuera del trampolín. Hay que tener reflejos rápidos y experiencia, porque el deportista puede elevarse hasta ocho metros en el aire y realizar giros longitudinales y hasta tres trasversales en fracciones de segundo.
El spotter debe conocer perfectamente las rutinas del gimnasta, anticipar los posibles desequilibrios y actuar de forma coordinada con el equipo médico y los jueces. Antes de cada competición se realizan simulacros para garantizar la seguridad de todos los participantes. Es una función que no se ve, pero que da mucha tranquilidad a los gimnastas.
¿Qué tipos de pruebas o modalidades existen dentro de la gimnasia de trampolín?
En total, hay cuatro especialidades reconocidas por la Federación Internacional de Gimnasia (FIG): trampolín individual, trampolín sincronizado, doble minitramp y tumbling.
- Trampolín individual es la disciplina más conocida y olímpica desde Sídney 2000. Los gimnastas realizan una serie de diez saltos con combinaciones de giros trasversales y longitudinales. Se valora la dificultad, la ejecución y el tiempo de vuelo, es decir, cuánto tiempo permanecen en el aire y el HD que es en qué parte del trampolín ha pisado el gimnasta. El resto de las especialidades no son olímpicas.
- Trampolín sincronizado es similar, pero participan dos gimnastas al mismo tiempo en trampolines paralelos, realizando exactamente los mismos elementos al unísono. La sincronización entre ambos es clave, además de la técnica individual.
- Doble minitramp combina carrera, impulso y acrobacias. El gimnasta toma carrerilla, ejecuta un primer salto en el minitrampolín y, tras rebotar, realiza un segundo salto antes de la recepción final. Es una prueba muy explosiva y espectacular.
- Tumbling se practica sobre una pista elástica de 25 metros. El gimnasta realiza una serie encadenada de 8 elementos acrobáticos a gran velocidad. Es la disciplina que más potencia física requiere y una de las más exigentes técnicamente.
En nuestro club trabajamos las cuatro, lo que no es habitual en España, y permite a los gimnastas encontrar la modalidad que mejor se adapta a sus capacidades.
¿Qué preparación requiere un gimnasta de trampolín de alto nivel?
Es un deporte muy completo. La preparación combina fuerza, control corporal, flexibilidad, orientación espacial y concentración mental. En el trampolín, por ejemplo, el gimnasta debe mantener una posición estable sobre una superficie muy elástica, ajustando cada rebote con precisión milimétrica. Un pequeño error en el eje corporal puede alterar todo el ejercicio. En tumbling y doble minitramp el entrenamiento incluye carreras, pliometría y técnica de vuelo, porque las velocidades son mucho más altas.
Además, se trabaja mucho la visualización: el gimnasta debe saber en todo momento en qué punto del aire se encuentra para completar los giros correctamente. Y, por supuesto, hay un componente psicológico muy fuerte: la confianza y el control del miedo son tan importantes como la fuerza física.
¿En qué nivel se encuentra España dentro del panorama mundial?
España ha progresado enormemente en los últimos años. En trampolín individual, por ejemplo, logramos por primera vez clasificar a dos gimnastas (David Vega y Noemí Romero) para los Juegos Olímpicos de París 2024 y en este último campeonato del mundo en Pamplona 2025, Jorge Martín ha quedado 5º. En doble minitramp, Melania Rodríguez ha sido campeona del mundo en dos ocasiones y es un referente internacional.
También hay una gran cantera en categorías inferiores. El nivel técnico es cada vez más alto, pero el principal reto sigue siendo la falta de instalaciones especializadas y de visibilidad mediática. Aun así, hay ilusión, trabajo y talento, lo que nos permite soñar con seguir creciendo.
El profesor junto a su equipo en el Campeonato del Mundo de Trampolín celebrado en Pamplona hace unos días.
¿Qué perfil debe tener un niño o una niña para iniciarse en este deporte?
Más que unas condiciones físicas concretas, lo importante es la actitud: ilusión, disciplina y ganas de aprender. Empezamos a trabajar con niños desde los tres años, en programas de iniciación psicomotriz y habilidades gimnásticas. Luego, poco a poco, se introducen las bases técnicas: control postural, saltos, equilibrio y coordinación.
El trampolín desarrolla cualidades que sirven para cualquier otro deporte: fuerza del core, propiocepción, seguridad en el movimiento y concentración. Además, inculcamos valores como el respeto, la educación y la superación personal. En gimnasia se aprende tanto a caer como a levantarse.
¿Y qué papel juega el Club Gimnasia Burgos en este desarrollo?
Nuestro club es un pequeño laboratorio de talento. Somos el único en Castilla y León que entrena las cuatro disciplinas olímpicas (artística masculina, artística femenina, gimnasia rítmica y trampolín), con gimnastas desde nivel escolar hasta internacional.
En la modalidad de trampolín, contamos con un equipo técnico especializado, en el que mi compañera Mónica Antolín, directora técnica y jueza internacional, tiene un papel fundamental en la preparación de alto rendimiento. Mónica ha sido premiada en la Gala del Deporte 2025 como la mejor juez este año, como un merecido reconocimiento a su trayectoria de más de 20 años como profesional. Además, Sergio Alonso se encarga de gran parte de la modalidad de tumbling.
A pesar de nuestros recursos limitados, hemos conseguido situar a Burgos en el mapa nacional, con gimnastas que compiten en campeonatos de España y en pruebas internacionales. Para nosotros, cada logro, grande o pequeño, es un salto más hacia la excelencia.
Vídeo en YouTube del Club Gimnasia Burgos.
Conclusión
La gimnasia de trampolín es una disciplina tan exigente como hermosa: combina la precisión técnica, la potencia física y el control mental. Desde Burgos, el profesor Francisco Javier González Arechavala y su equipo siguen impulsando este deporte con una filosofía clara: formar gimnastas capaces de volar alto, pero también de mantener los pies en la tierra.