Stem Talent Girl y Nuria Antón

La profesora Nuria Antón (con vestido rojo), acompañada por el resto de las mentoras durante la mesa redonda.

14 de marzo de 2024. La profesora de la Universidad Isabel I, Nuria Antón, mentora del programa STEM Talent Girl (STG), compartió sus reflexiones sobre la persistente brecha de género en el campo de la tecnología en una de las mesas redondas organizadas en el I Encuentro de Talento STEM femenino en Burgos. En esta jornada se analizó la necesidad de promover la participación femenina en este ámbito, como un foro de reflexión para contribuir al desarrollo tecnológico del municipio y la provincia de Burgos.

La mesa de mentoras de STEM Talent Girl contó con la presencia de Nuria Antón, que es doctora en Biología Molecular y Biotecnología, además de Coordinadora del Grupo de Investigación (GIR) Nutrición, Ciencias de los Alimentos y Salud; responsable de la Línea de Investigación Nuevas Perspectivas en las Ciencias de los Alimentos; Coordinadora Académica del Grado en Nutrición Humana y Dietética y Profesora del Grado en Nutrición Humana y Dietética de la Universidad Isabel I. Nuria Antón estuvo acompañada de Laura Barquín (IT Advanced Manufacturing 4.0 Manager en Antolín) y María Barreal (Sales Area Specialist Hiperbaric), así como Mónica García (Coach de Liderazgo Personal  y Profesional. MSc, PCC, CPCC, Team MGSCC, Fundadora de El Factor Humano.)

Intervención de Nuria Antón

Ante la pregunta sobre el origen del problema, Antón señaló que existen raíces culturales y educativas que perpetúan estereotipos de género desde la infancia. "Las niñas siguen siendo dirigidas hacia actividades consideradas femeninas, mientras que lo tecnológico se asocia mayormente con los niños", explicó. En este sentido, destacó la importancia de trabajar desde temprana edad para cambiar estas percepciones y fomentar la diversidad de intereses y aspiraciones entre los jóvenes.

Como parte del programa STG, Nuria Antón y otras mentoras, trabajan para empoderar a las jóvenes, transmitiendo confianza, responsabilidad y fomentando la curiosidad por las disciplinas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). "A las alumnas les quiero transmitir seguridad, confianza, fuerte autoestima e incentivar sobre todo responsabilidad", afirmó Antón. Además, enfatizó la importancia de romper estereotipos y adaptarse a los cambios en el panorama laboral, especialmente en el contexto de la cuarta revolución industrial, donde la tecnología está transformando la sociedad y el mercado laboral de manera acelerada.

La mentora de la Universidad Isabel I compartió también su experiencia personal, destacando el papel de su madre como referente que la inspiró a seguir su pasión por la ciencia y la investigación. "Mi madre nos dio como única opción estudiar lo que más nos gustara para tener oportunidades en el mundo laboral y así vivir con autonomía sin depender de nadie", comentó Antón. En cuanto a la percepción de la brecha de género en Burgos, reconoció que aún persisten desafíos en términos de conciliación laboral y educación igualitaria, pero destacó la importancia de seguir trabajando para superar estas barreras y crear un entorno más inclusivo y equitativo para todas las personas.

Finalmente, la mentora subrayó la gratificación que encuentra en su labor de mentoring, destacando la oportunidad de transmitir conocimiento y aprender de las nuevas generaciones de talento femenino. "Ellas me enseñan mucho sobre las necesidades actuales de crecimiento del talento", concluyó Antón, resaltando el papel fundamental que desempeñan los programas como STG en la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en el ámbito STEM.

Conclusiones

En la jornada se organizó otra mesa redonda para abordar la necesidad de promover la diversidad y el esfuerzo que es clave ante la falta de talento para cubrir los perfiles que demandan las empresas. La Universidad Isabel I, como partner educativo del programa, ha apostado por el fomento de la vocación STEM entre las jóvenes.

Desde su creación hace ya 7 años, más de 700 niñas burgalesas han participado en este programa que ha desarrollado más de 100 actividades, con el objetivo de guiar y acompañar en su trayectoria educativa a las niñas para que puedan desarrollar su futuro en materias como ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas.