
23 de junio de 2025. Un reciente estudio publicado en la revista Cuadernos de Psicología del Deporte (Vol. 25, nº 2, mayo de 2025) ha revelado que los jugadores de baloncesto en silla de ruedas (BSR) que compitieron en la Copa del Rey 2023 presentan bajos niveles de estrés y altos niveles de recuperación psicológica, lo que sugiere una sólida preparación mental ante la alta exigencia competitiva.
La investigación, titulada “Factor estrés-recuperación en División de Honor de baloncesto en silla de ruedas”, fue realizada por el profesor Víctor Martín, docente del Grado en CAFD la Universidad Isabel I, en colaboración con Ariadna Hernaiz Sánchez, Tamara González Gil y Alejandro Sal de Rellán. A través de un enfoque cuantitativo y el uso del cuestionario RESTQ-Sport, el estudio evaluó a 38 jugadores (hombres y mujeres) pertenecientes a los ocho equipos clasificados para la Copa del Rey de la temporada 2022/2023 de la Liga Española de División de Honor.
Entre los hallazgos más destacados, se concluye que no existen diferencias significativas en los niveles de estrés y recuperación entre sexos ni en función de la experiencia deportiva. Sin embargo, los jugadores más experimentados tienden a recuperarse mejor, lo cual podría estar relacionado con una mayor autoeficacia y adaptación psicológica al entorno competitivo.
Estrategias de recuperación
Los autores destacan que los deportistas ya aplican estrategias efectivas de recuperación, como la planificación del descanso, el uso de técnicas de relajación y el apoyo psicológico. Además, la investigación subraya la importancia de continuar fortaleciendo este equilibrio para evitar el sobreentrenamiento, una condición que puede comprometer tanto el rendimiento como la salud mental del jugador.
“El estrés, si bien puede ser motivador en niveles adecuados, debe ser cuidadosamente gestionado, especialmente en el deporte adaptado, donde las exigencias físicas y emocionales conviven estrechamente con factores sociales y personales”, señalan los investigadores en el artículo.
Este estudio supone un avance relevante en el ámbito del deporte adaptado, ya que es el primero en explorar de forma específica la relación entre estrés y recuperación en el baloncesto en silla de ruedas profesional en España. Los investigadores proponen ampliar la muestra y replicar el estudio en otros contextos competitivos para validar los resultados y desarrollar programas psicológicos más específicos.