Irrupción de la Inteligencia Artificial en la educación

Tecnología educativa y competencia digital docente.

Serie: 'El chip del aprendizaje' (XXII)

En las últimas semanas y meses se está hablando de un tema que está generando bastante controversia en el ámbito académico: la inteligencia artificial (IA). Este avance tecnológico está considerado como la solución a algunos de los mayores desafíos que existen en el ámbito de la educación: desarrollo de prácticas innovadoras, consecución de algunos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, etcétera. (González y Silveira, 2022). De hecho, en la actualidad existen numerosas aplicaciones de la IA, no necesariamente diseñadas para el ámbito educativo, pero que son de gran utilidad y beneficio en el contexto escolar (como, por ejemplo: LearningML). Desde esta perspectiva, organismos como la UNESCO apuestan por el uso de la IA en la Educación, especialmente para el desarrollo de las capacidades humanas y la protección de los derechos humanos, aprovechando así su potencial para alcanzar los retos de la Agenda de Educación 2030.

Ante este panorama, una de las preguntas más recurrentes y que más se cuestionan los docentes es cómo utilizar la IA dentro de sus aulas. A día hoy es innegable la capacidad que tiene la IA para ofrecer información sobre un tema, realizar presentaciones, etc., pero dentro del contexto escolar sus principales aplicaciones se orientan a:

1) Aprender con la IA (mediante el manejo de la IA y sus herramientas en el aula).

2) Aprender sobre la IA (su funcionamiento, técnicas y comandos).

3) Prepararse para la IA, pues no hay que olvidar que la escuela tiene entre sus finalidades la de preparar a los estudiantes para la sociedad en la que les va a tocar convivir con otras personas (e incluso con máquinas o IA).

A partir de estas tres categorías resulta necesario explicar que dentro de las aulas la IA se emplea por los docentes para:

1) Crear plataformas de aprendizaje autónomo (favoreciendo así el aprendizaje personalizado y satisfacer las necesidades que presenta cada alumno).

2) Empoderar a los docentes y mejorar la calidad de la enseñanza mediante asistentes impulsados por la IA.

3) Potenciar el aprendizaje a lo largo de la vida (tanto de docentes como de escolares), entre los principales usos de la IA.

Aunque parecen evidentes las bondades que puede aportar la IA a la educación, su impacto todavía es incipiente y aunque su presencia en el ámbito educativo se justifica por el beneficio que puede suponer para los discentes en su formación, su utilización también entraña riesgos que deben ser tenidos en cuenta por los docentes. De estos posibles riesgos, la aplicación más conocida y que en la actualidad es tema candente es Chat GPT. Esta aplicación de IA supone uno de los grandes retos a los que se enfrenta el profesorado y, en concreto, la evaluación del alumnado, pues hoy en día no existe una aplicación de IA que detecte si un texto ha sido elaborado por la IA. En consecuencia, el uso de esta aplicación requiere de ciertos criterios y sensatez, así como capacidad crítica y reflexiva para que se pueda utilizar de manera responsable y obtener el mayor beneficio posible y, para ello, es necesario que los discentes estén bien formados. Esto reafirma la necesidad de una formación adecuada en tecnología educativa y competencias digitales para poder afrontar con éxito este reto tan presente en la actualidad en el ámbito educativo.

Bibliografía

González, R. A., & Silveira, M. H. (2022). Educación e Inteligencia Artificial: Nodos temáticos de inmersión. Edutec. Revista Electrónica De Tecnología Educativa, (82), 59-77.

UNESCO (2023). La Inteligencia Artificial en la Educación. 

Editor: Universidad Isabel I

ISSN 2792-2340

Burgos, España