La historia del Carnaval

El Carnaval en el sambodromo de Río de Janeiro, en Brasil.

Hoy en día, la celebración del carnaval más grande del mundo tiene lugar en Río de Janeiro, aunque es una festividad, que tiene eco internacional por buena parte del planeta, especialmente en Europa y América. Son famosos también en España el carnaval de Cádiz, el de Santa Cruz de Tenerife o los de Colonia en Alemania, Venecia en Italia, Barranquilla en Colombia, Veracruz en México o Nueva Orleans en Estados Unidos.

Los orígenes de esta fiesta se remontan a orígenes precristianos, y no es de extrañar, porque esta fiesta combina elementos tales como disfraces, desfiles, grupos que cantan coplas, fiestas en la calle o excesos en los placeres carnales. Los orígenes oficiales podrían estar en las fiestas paganas que los romanos realizaban en honor a Baco, dios del vino o los Saturnales, una festividad romana que homenajeaba al Dios Saturno. En la Grecia clásica, se puede asociar a las bacanales y las Dionisias, fiestas que veneraban al dios Dioniso, símbolo de la fertilidad, la diversión, el teatro y el vino. Algunos autores indican que esta festividad puede proceder de la fiesta que en Egipto se realizaba en honor al toro Apis, un toro vivo que albergaba el espíritu divino hasta su muerte y que era venerado como un dios. Esta festividad se extiende a las fiestas andinas prehispánicas y las culturas afroamericanas que se celebran, con características similares, en esta época del año.

Sea como fuere, la Iglesia asoció esta celebración con el hecho de despedirse de comer carne y de llevar una vida desenfrenada durante el tiempo de Cuaresma (40 días), destinado a la preparación espiritual de la fiesta de la Pascua, con seis semanas de purificación e iluminación interna que comienza el miércoles de Ceniza. Los días de Carnaval se convierten en un periodo de permisividad y crítica social, donde se ridiculiza a las clases gobernantes. También está relacionado con la finalización de la siembra de invierno y el comienzo de un nuevo periodo de fertilidad con la llegada de la primavera.

Si pensamos en la etimología de la palabra Carnaval, proviene del italiano carnevale, palabra compuesta por el término latino caro-carni, en su acusativo care, que se traduce como carne y se vincula con la raíz indoeuropea kreue (carne viva, sangre o costra), unido al verbo levare (elevar, quitar de encima) que dio origen a los términos: llevar, aliviar o levantar. La idea es quitar toda la carne de la casa antes de empezar la Cuaresma, momento en el que comienza el periodo de ayuno y abstinencia hasta el domingo de Ramos.

Carnaval en Nueva Orleans.

Las máscaras y disfraces, que representan los vicios y las virtudes de los hombres se introdujeron en esta festividad en Italia, concretamente en Venecia. La Iglesia consideró que esta fiesta, que daba rienda suelta al desenfreno, fue prohibida en la Edad Media. No obstante, al final este periodo histórico, los venecianos aunaron disfraces y máscaras, como fiesta en la que se entremezclaron la burla, el engaño y la diversión, que permitió a la población tener una válvula de escape para soportar los rigores impuestos por la Iglesia en Cuaresma.

Y es hoy, martes de Carnaval, cuando finaliza este periodo de fiesta y desenfreno, con una despedida por todo lo alto. Cuando se acerca la medianoche, apurando la fiesta hasta el último minuto, se celebra el tradicional entierro de la sardina, aunque en Santoña, lo han adaptado al entierro del besugo. Y hay otras variantes sobre esta despedida en tono jocoso y burlón, en el que la población, vestida de riguroso luto, pone el punto final a los días de fiesta con la quema de la sardina.

La tradición de la despedida tiene variantes. En mi pueblo natal, A Pobra do Caramiñal, en A Coruña, tiene lugar el ‘El entierro de Felipiño’, un hombre que, fallece tras los excesos cometidos en estos días. La tradición se pierde en la noche de los tiempos y, posiblemente, esté inspirada en un hecho real. Los vecinos representan a Felipe con un muñeco de trapo al que transportan en una litera adornada con flores, al estilo romano, y, tras pasearlo por el pueblo con su procesión de luto, es arrojado al mar.

La medianoche es el final de esta fiesta pagana, adaptada al calendario religioso por el inicio de la Cuaresma, en la que el ayuno y la abstinencia estarán presentes en el día a día de los fieles, como preparación para la Semana Santa.

Referencias

Etimología del carnaval. Etimologías.dechile.net.

Los orígenes del carnaval. La fiesta que representaba el paganismo. Nationalgeographic.com

Historia y origen del carnaval. La fiesta más antigua del mundo. Carnivaland.net

Carnaval: qué es y origen de las fiestas de los carnavales. Diariocritico.com

Historia del carnaval. Muyinteresante.es

Historia del carnaval: cómo surgió y dónde se celebra. Europapress.es

La historia del carnaval. La fiesta donde hoy todo vale y nació hace 5000 años como una celebración religiosa. Infobae.com