Juan Agustín Fraile Nieto Profesor de Grado en Ingeniería Informática
Jue, 29/09/2016 - 23:58

Según han ido evolucionando los modelos de desarrollo de software, algunas de las metodologías tradicionales se han ido quedando obsoletas. Las necesidades diarias de los equipos de IT van cambiando. Una de las críticas principales a las metodologías tradicionales es su excesiva burocratización y los sobrecostes que supone el mantenimiento del software desarrollado. En oposición a esto se propone una serie de metodologías llamadas ligeras o ágiles.

Son varias las metodologías ágiles en auge en el mercado. Hay algunas que se centran más en la gestión del trabajo en equipo, como Scrum, que facilita la comunicación entre los desarrolladores y el cliente. Hay otras metodologías que se centran más en las prácticas de programación, como Extreme Programming. No quiere decir esto que esta metodología deje a un lado el trabajo en equipo, todo lo contrario. Extreme Programming considera que la programación es una actividad que resulta mucho más productiva hecha en grupo, en lugar de tener a cada programador aislado en su puesto de trabajo.

DevOps es un término que agrupa un conjunto de conceptos innovadores. Conceptos que no son nuevos y han experimentado un resurgimiento y rápida difusión a través de la comunidad técnica. DevOps, a modo de resumen, indica una «administración ágil de sistemas». Propone un modelo de trabajo colaborativo entre los equipos de Negocio, Desarrollo de Software, QA (Tester) y Operaciones.

DevOps es una filosofía de trabajo que cambia por completo el modelo actual. La diversidad de herramientas novedosas que utilizan estas metodologías no es el verdadero problema al que se enfrentan los profesionales IT. El verdadero problema está en la adaptación a este nuevo modelo. En la actualidad hay un porcentaje muy alto de profesionales acostumbrados a una forma de trabajar, que tienen que adecuar sus conocimientos a este nuevo patrón.

Volviendo al título del post, DevOps 4 en 1, las empresas están transformando sus prácticas de ALM (Application Lifecycle Management) para fusionar en el ciclo a los equipos de Negocio, Desarrollo de Software, QA (Tester) y Operaciones. La finalidad es realizar entregas de software de manera ágil, con nuevas funcionalidades y gran calidad. Todos estos nuevos conceptos o tecnologías se estudian en el Grado en Ingeniería Informática.

Para terminar, quiero indicar que nos encontramos en una época de transición en el sector del desarrollo de aplicaciones. Tenemos que tratar de hacer las cosas de manera diferente desde los cimientos, la Universidad, ya que esta vuelta de tuerca tiene que tener una base sólida en el origen. Esto facilitará la inserción de futuros profesionales con un gran potencial en las empresas y en los ciclos de transformación de las mismas.

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